miércoles, 29 de mayo de 2019

Mi opinión sobre dietas de restricción calórica


Los que me habéis leído por aquí sabéis que me gusta el tema de la alimentación, aunque yo no siempre soy capaz con cumplir con lo que escribo. A lo mejor por eso me gusta tanto 😊

He sacado una conclusión en cuanto a las dietas adelgazantes hipocalóricas; que no sirven, al menos a mí no.
Por supuesto es mi humilde opinión y no demasiado científica. Se basa es experiencias personales, así como simple lectura de libros elegidos por mí y que de algún modo seguramente me den las respuestas que yo mismo quiero escuchar.

Al tema. Si se quiere adelgazar lo más habitual es intentar comer menos calorías de las que uno gasta a lo largo del día, de esta manera conseguimos bajar de peso. Una vez un nutricionista me dijo que por cada 6000 kcal de déficit de calorías perdíamos 1 kilo de peso.

En cuanto menos calorías ingerimos más rápido adelgazamos. La verdad es que este planteamiento suele funcionar a corto plazo, pero viendo mi propia experiencia, la gente de mi entorno, así como analizando datos que he encontrado en la red y tras haber hablado con mi médico de cabecera, lo más normal es que pasados unos meses los que han conseguido esa deseada bajada de peso han vuelto a coger esos kilos y además sumado unos pocos más. Lo que llamamos efecto yo-yo o rebote.

Para perder peso al final hay que gastar más calorías de las que ingerimos, pero de una forma controlada, sin pasar hambre y eligiendo siempre alimentos saludables. Una vez que hemos perdido peso hay que seguir con esta dieta igualando las calorías ingeridas con las consumidas, pero manteniendo la dieta saludable.
Cuando nos vamos a una dieta hipocalórica normalmente hay una restricción significativa de calorías con el fin de bajar de pedo rápidamente, estas son las dietas a las que me quiero referir.

El cuerpo se acostumbra con mucha facilidad a la falta de calorías de estas dietas, adaptándose este a las calorías que se consumen. Cuando dejamos la dieta y volvemos a comer lo de antes, ganamos el peso perdido en un santiamén y vuelta empezar.

El tema de consumo de calorías me resulta poco fiable en mi experiencia y me pongo como ejemplo.
En las pruebas de esfuerzo que me realizo casi anualmente me dicen que mi consumo basal diario (el consumo que tengo simplemente respirando) está en torno a las 1800kcal.
Si un día en concreto, con el reloj deportivo en la muñeca, realizo una sesión de running de hora y media de forma medio intensiva, el reloj basándose en los datos que tiene de mí y las pulsaciones que saca del pulsómetro que llevo en el pecho, me dice fácilmente que he consumido unas 1100-1200 kcal en esa sesión.

Mi experiencia (mi experiencia no me hace ser un experto, solo cuento lo que me pasa a mi y lo que veo a mi alrededor) me dice que si yo ese día de entreno consumo 1800kcal (consumo basal) + 1100kcal (consumo por mi actividad física) no adelgazo, lo contrario, gano peso. Eso lo tengo más que demostrado. Si esas calorías las ingiero en forma de bollería industrial en vez de opciones más saludables engordo aún más. Si la teoría de las calorías fuese cierta y me tomase las calorías permitidas en forma de donuts no debería engordar, ¿no? Pues yo engordo.
Un donut de Panrico tiene 199kcal. Podría un día de entreno comer unos 15 donuts para llegar a las 3000 kcal (1800 + 1200).
Obviamente en un solo día no se si he adelgazado, mantenido o cogido peso, pero a lo largo de unas pocas semanas repitiendo esta conducta sí que puedo comprobarlo.
Debo decir que los días de entreno no suelo bajar de peso, me imagino a que se debe a que los músculos ese día están más hinchados y pesan lo suyo, la perdida de peso suele venir tras el descanso.

La alternativa a una dieta hipo calórica para perder o mantener el peso.
De lo que me he dado cuenta es que la única dieta que me salva de coger peso es la de comer saludable, pero sin pasarme (eso sería una dieta hiper calórica) porque la comida saludable también tiene calorías, poniendo como ejemplo los frutos secos que aun teniendo grasas sanas son muy calóricas.

Cuando me refiero a comer sano me refiero a comer verduras, frutas, legumbres, cereales integrales, algo de frutos secos y de vez en cuando pescado y carne

De este modo tenemos todos los macronutrientes (lípidos, proteínas e hidratos de carbono). El día que hago deporte me aseguro de tomar algo más de hidratos de carbono que otros días y los días de descanso algo más de proteínas.

Los HCs también mejor mayormente hasta la ingesta de la comida y menos para cenar, excepto si voy a entrenar duro o competir al día siguiente, donde si que ceno más HCs.
Cuando se opta por comer saludable el cuerpo se habitúa a estar bien y tampoco es que note un subidón de energía al alimentarme, pero cuando por ejemplo en vacaciones cambio de hábitos, normalmente a peores, sí que noto rápido la falta de energía en el día a día y en los entrenos.

Para mí la dieta mediterránea no existe, es más bien un concepto que una realidad. Si en España se comiese basándose en la dieta mediterránea no tendríamos los índices de sobrepeso que tristemente padecemos.

Comiendo de forma saludable como solución para no padecer de sobre peso, conseguimos una cosa aún mucho más importante para perder peso, que no es otra que evitamos todos los alimentos que serían la alternativa a lo saludable y que en realidad son los que nos hacen ganar peso; bollería industrial, comidas ultra procesadas como embutidos, salchichas, refrescos, etc.

Nos gusta decir que hay que comer de todo y seguramente, muy de vez en cuando, no lo podamos permitir sin ningún tipo de consecuencia, pero en ningún caso eso será saludable, al igual que productos anunciados en la tele y que dicen que es una estupenda forma de empezar el día o una sana merienda; bollería, cereales con azúcar o chocolate, Nutella, galletas, comida envasada como lasaña, etc. Están repletos de azucares, sales, aceites de escasa calidad, grasas saturadas, etc.

Cuando tomemos estos productos, que seamos conscientes de que estamos tomamos cosas que no son buenas para nosotros con índices de sal, grasas, etc. poco saludables.

Por mucha fibra añadida que les han añadido a las galletas o por no añadirlas azúcar, siempre será mejor comer una manzana.

Los aditivos que introducen en los alimentos para mí no son los culpables para ganar peso, un ejemplo y vuelvo al mismo producto que por otro lado me encanta; los donuts. Comer un donut no es malo para nosotros por los aditivos y conservantes que tiene, es malo por la cantidad de azúcar que tiene, por la harina ultra refinada totalmente ausente de fibra. Los aditivos no serán buenos, pero no te harán engordar.

Hay mucho debate sobre si es sano comer fruta como postre después de la comida. Siendo o no lo más aconsejable, siempre será mejor comer una fruta de postre que la alternativa, que suele ser un flan con/sin nata, un bollo, una tarta de queso, un helado u otras opciones mucho menos aconsejables que una fruta. A veces es más importante lo que dejas de comer que lo que realmente comes.

Lo mismo con la cena, solemos decir que la fruta de cena engorda porque tiene mucha azúcar... Pues fructosa sí que tiene y seguramente será mejor comer la fruta a media mañana que tomarla de cena, pero si padeces sobrepeso, lo más probable sea que no sea por culpa de la fruta que cenas.

En mi opinión no hay que hacer nunca una dieta hipo calórica "radical", estaremos en un círculo vicioso donde con los años cada vez pesemos más y donde cada vez nos costará más perder de peso.